En el 45° aniversario de la consagración, la iglesia Catedral “Nuestra Señora del Rosario”, también celebró los 63° años de la ordenación episcopal de monseñor Alberto Pascual Devoto. Para honrar la solemnidad, celebraron una misa presidida por el obispo, monseñor Adolfo Ramón Canecin el 17 de septiembre de 1961. “Que cada bautizado pueda valorar y descubrir su lugar en la Iglesia” animó el prelado diocesano.
revalorizar nuestro bautismo, descubrir que somos hijo de Dios e hijos de la Iglesia. Nadie puede tener a Dios por Padre, si no tiene a la Iglesia por Madre” destacó.
“Que importante es la Virgen María en el cuerpo que es la Iglesia. La Virgen es la mediadora universal de toda gracia. Todo lo que es de Dios puede llegar al cuerpo a través de la bienaventurada Virgen María y todo lo que la Iglesia quiere entregar a Dios, pasa a traves de ella, llega a Cristo y luego al Padre” concluyó el obispo.
Previo a la celebración eucarística, la Hermana Alcira Blanco de la Congregación de las Hermanas Carmelitas Misioneras Teresianas, tuvo a su cargo un relato histórico sobre la historia de la Iglesia Catedral de Goya, destacando que el 17 de septiembre de 1979 fue dedicada la Catedral y se colocó debajo del altar las reliquias de primer grado de San Justino y de Santa Victorina, que fueron llevados en procesión desde el Instituto Santa Teresa de Jesús hasta el templo catedralicio.
“He tenido la gracia de estar presente en ese momento de la dedicación, así que, por eso, hoy puedo contarles con todo mi cariño y “como signo externo de la dedicación se colocaron en 12 cruces en las columnas del templo, son de piedra rosada de la localidad de Mercedes y representan a los 12 apóstoles” evocó.
“Damos gracias a Dios y a la Virgen del Rosario que quiso estar en una Iglesia dedicada” concluyó la hermana Alcira Blanco.