Un nuevo incendio forestal azota a la provincia de Córdoba desde este jueves por la tarde y está fuera de control. Cuatro bomberos tuvieron que ser trasladados con heridas. Además, por la densidad del humo se interrumpió el tránsito en la autopista que conecta la capital provincial con Carlos Paz y ya se desplegó un fuerte operativo.
“No tenemos en este momento muchas precisiones. Lo que sí sabemos es que hay dos en estado reservado, uno de ellos en terapia intensiva. Están en el Hospital Córdoba. Por ahora lo que esperamos es no tener nuevos heridos. Dejamos un puesto sanitario con una terapia intensiva móvil a la altura del peaje para hacer la asistencia rápida de cualquier otro herido”, confirmó el ministro de Salud cordobés, Ricardo Pieckenstainer, en diálogo con TN.
El frente del incendio se extiende por casi un kilómetro, en un bosque ubicado entre la autopista y la localidad de La Calera. Las llamas llegaron hasta el borde de la autovía, e incluso se quemaron varios carteles publicitarios. Por este motivo se bloqueó el paso desde el puente Primero de Mayo hasta el puente Falda del Carmen. Es la misma zona donde se habían producido algunos de los incendios al inicio de la semana.
El vocero de la Secretaría de Gestión de Riesgo Climático, Roberto Schreiner, confirmó que en el lugar trabajan 200 bomberos de cuarteles de toda la región que acudieron a la emergencia. También prestan asistencia dos aviones hidrantes.
Una vez más, las condiciones climáticas son favorables para una rápida propagación de las llamas. Hay fuertes ráfagas de viento norte que superan los 60 km/h, la temperatura es elevada, por encima de los 25 grados, y la humedad relativa cayó por debajo del 20%.
“Ahora el enemigo número 1 es el viento. Esperamos tener ráfagas toda la noche. El incendio empezó con unos 400 metros de frente para cuando llegaron los bomberos. Todavía no tenemos ninguna presunción sobre cómo empezó todo”, declaró Schreiner.
Esta vez el fuego se expande en una zona despoblada. Aunque por el desarrollo de la emergencia no se descarta que la propagación perjudique a los residentes.