El Presidente recibirá este sábado en la ciudad de Hamburgo una medalla de la Sociedad Hayek y tendrá un encuentro sin honores ni rueda de prensa con el canciller germano Olaf Scholz.
El presidente Javier Milei arribó a Hamburgo acompañado por su hermana Karina Milei y el diputado del Pro, Fernando Iglesias, quien preside la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados. Su llegada al aeropuerto fue recibida por el embajador en Alemania, Fernando Brun; el agregado de Defensa en Alemania, capitán Garcia Bonini; y el cónsul General en Hamburgo, Maite Fernández.
Simultáneamente, a pocos metros de distancia, comenzaba una protesta convocada por grupos de izquierda y organizaciones de inmigrantes latinoamericanos. Cerca de 200 manifestantes se congregaron en Landungsbrücken, junto al hotel Hafen donde Milei recibirá el premio de la Sociedad Hayek, en honor al economista ultraliberal Friedrich von Hayek, premio Nobel de Economía en 1976 y figura destacada de la Escuela Austriaca.
Desde una camioneta decorada con consignas como “Milei pará la mano, no a la Ley Bases” y banderas multicolores de colectivos LGTB+, los activistas lanzaron discursos y cánticos contra Milei, acusándolo de fascista y denunciando sus políticas. Entre los manifestantes, se destacaban varios latinoamericanos y argentinos con banderas albicelestes, quienes marcharon hasta el Hotel Hafen.
“¡Fuera Milei! ¡No pasarán, no pasarán!”; “¡Milei, basura, vos sos la dictadura!”; “¡Milei fascista, vos sos el terrorista!”; “¡Libertad, libertad a los presos por luchar!”; “¡No a Milei! ¡No a Milei!” entonaron los manifestantes
Silvia Velázquez, de la Agrupación Mujeres sin Fronteras, comentó que “inicialmente se esperaba la presencia de unas 500 personas en la protesta, pero la coincidencia con eventos deportivos como la Eurocopa redujo la concurrencia”.
Hamburgo, una ciudad de casi dos millones de habitantes conocida por su vida nocturna y cultural, será solo el inicio de la visita de Milei a Alemania. Mañana se espera su reunión clave en Berlín con el canciller Olaf Scholz, aunque la visita ha generado controversia debido a la recepción de una medalla de la Sociedad Friedrich von Hayek y sus críticas al socialismo y a líderes como Pedro Sánchez en visitas anteriores.
La agenda original de la visita incluía una reunión bilateral con honores militares y una conferencia de prensa conjunta, pero a solicitud argentina, según fuentes de la cancillería alemana, fue degradada a una reunión de trabajo centrada en temas políticos y económicos.